El Día de la Madre es una de esas fechas que todos conocemos, pero ¿sabías que su historia es más interesante de lo que parece? Aquí te lo contamos:

Desde sus humildes comienzos hasta convertirse en una celebración global, este día tiene una historia llena de curiosidades. El Día de la Madre, una festividad que hoy celebramos con regalos, tarjetas y muestras de cariño, tiene un origen fascinante que se remonta a principios del siglo XX en Estados Unidos. A diferencia de lo que muchos podrían suponer, su instauración como ahora la conocemos no está vinculada a motivos religiosos, sino más bien a la reivindicación de los derechos de la mujer y la promoción de la paz. 

Desde la antigua Grecia, donde se honraba a Rhea, la madre de los dioses, hasta en Egipto, donde se veneraba a Isis como la Gran Diosa Madre, la maternidad siempre ha sido objeto de admiración y respeto. Aunque los orígenes históricos se remontan a tiempos antiguos, la versión moderna del Día de la Madre tiene sus raíces en Estados Unidos. En el siglo XIX, activistas como Julia Ward Howe abogaron por un día dedicado a la paz y la maternidad como una forma de unir a las madres en la lucha por los derechos de las mujeres. Más tarde, en 1908, Anna Jarvis organizó el primer Día de la Madre en Estados Unidos como un tributo a su propia madre. Tradicionalmente, en Estados Unidos se celebra el segundo domingo de mayo.

En España, la celebración del Día de la Madre tuvo sus inicios formales en el año 1926. Desde entonces, ha evolucionado hasta convertirse en una festividad ampliamente reconocida y celebrada, aunque con sus propias peculiaridades y tradiciones. Según recogen los archivos de la Biblioteca Nacional de España, este día se celebró por primera vez el 4 de octubre de 1926, siendo Madrid la sede de esta fiesta con un acto tan sencillo como emotivo: repartir flores a los niños para que se las llevasen a sus madres. Hasta los años 60, en España el Día de la Madre se celebraba el 8 de diciembre. Sin embargo, en esta década Galerías Preciados adoptó la costumbre de celebrar el Día de la Madre en mayo, siguiendo la tradición de Estados Unidos. En una especie de guerra comercial, El Corte Inglés, su gran competidor en aquella época, mantuvo la fecha del 8 de diciembre, de tal forma que en España hubo unos años en los que el Día de la Madre se celebraba dos veces. Estas dos fechas, mayo y diciembre, conviven hasta 1965 cuando las autoridades eclesiásticas optan por celebrar la fiesta en mayo, dentro del mes consagrado a la Virgen. De esta forma, se separa el día dedicado a las madres y el día de la Inmaculada Concepción. El Día de la Madre en España se celebra el primer domingo de mayo desde 1965, aunque nunca se ha declarado oficialmente y tiene un carácter principalmente comercial y popular.

En resumen, el Día de la Madre en España es una celebración arraigada en la historia y la cultura de nuestro país y, aunque resulte un sorprendente, en el mundo es el tercer día festivo más popular, sólo por detrás de la Navidad y Pascua.